Reseña de la exposición RUBENS, VAN DYCK Y LA EDAD DE ORO DEL GRABADO FLAMENCO. Sala Recoletos de la Biblioteca Nacional de España (BNE). Pº de Recoletos 20-22. Madrid. Hasta el 31 de enero de 2016. Comisaria: Concha Huidobro.
La exposición que te recomendamos esta semana representa una cita imprescindible para todo apasionado de la pintura, del dibujo, del grabado y del arte en general. Se trata de Rubens, Van Dyck y la Edad de Oro del grabado flamenco, que se podrá ver, en la Sala Recoletos de la Biblioteca Nacional de España (BNE), hasta el próximo 31 de enero de 2016.
Primera exposición de la colección de grabados flamencos del siglo XVII de la BNE
Comisariada por Concha Huidobro, Jefa del Departamento de Grabados de la Biblioteca Nacional entre 2004 y 2013 y una de las máximas expertas de la materia en España, la exposición cuenta con un total de 180 obras. En su gran mayoría pertenecen a la importante colección de grabados flamencos del siglo XVII conservados en la BNE, nunca expuestos antes en su conjunto. Además, se podrán ver cuatro pinturas cedidas temporalmente por el Museo Nacional del Prado: La Piedad y Retrato de María Ruthven, de Van Dyck; La Sagrada Familia con Santa Ana, de Rubens y La Cocina, de David Teniers. Así mismo, en el apartado de la muestra Rubens y las artes del libro, se presenta una selección de libros ilustrados, pertenecientes a la colección de la BNE, cuyas portadas fueron realizadas por el pintor flamenco. Entre ellos, destaca el famoso Pompa Introitus, que narra la entrada en Amberes del Cardenal Infante Fernando de Austria, hermano del Rey Felipe IV.
En este video se pueden ver algunas imágenes de las obras y del montaje de la exposición:
Rubens, Van Dyck y la trascendencia del grabado flamenco
Maestros indiscutidos de la pintura barroca y en particular del arte flamenco, Peter Paul Rubens (1577-1640) y su discípulo, amigo y posteriormente rival artístico, Anton van Dyck (1599-1641), protagonizan esta exposición, bien como autores de las obras expuestas o bien como presencias evocadas a través del trabajo de otros artistas, que trabajaron en estrecho contacto con ellos o bajo su supervisión directa. Si por su parte Van Dyck realizó algunos magníficos grabados y empezó algunos al aguafuerte, que terminaron otros grabadores al buril, de Rubens solamente se conocen dos grabados atribuidos a él. Sin embargo, es conocida su tarea de supervisión de la labor de renombrados grabadores de la época, como Galle, Vorsterman, Bolswert o Pontius, que reprodujeron muchas de sus pinturas.
Como comenta la comisaria: «lo que [Rubens] hacía era buscar a los mejores grabadores europeos para que copiaran sus propios cuadros en las planchas, y luego los publicaran. Él hacía los dibujos preparatorios y revisaba el resto del trabajo (…). Era muy exigente y les ponía muy nerviosos. Con uno de los más importantes, Vorsterman, tuvo una disputa tan grande, que Rubens pidió una especie de orden de alejamiento contra él. Aunque acabaron haciendo las paces. Mi idea es que se enfadaron por los derechos de los grabados».
Rubens, Van Dyck y el grabado flamenco en general tuvieron una influencia trascendental sobre muchos artistas, también en otros países europeos. En la exposición se recuerdan, entre otros, el holandés Rembrandt, el francés Jacques Callot o el italiano Guido Reni. En particular se destaca la importancia del grabado en la España del siglo XVII, donde trabajaron varios artistas flamencos y donde tuvieron un papel fundamental las estampas de otro gran pintor del barroco, José de Ribera, conocido popularmente con el apodo italiano de “lo spagnoletto” (el españoleto).
Con ocasión de la exposición se ha editado un catálogo con ilustraciones, cuyo texto se articula en cinco capítulos, correspondientes a las otras tantas secciones que componen el recorrido expositivo: Rubens y los mejores grabadores de sus obras; Van Dyck, discípulo de Rubens y extraordinario retratista; Los nuevos géneros artísticos: paisajes y escenas de costumbres; la ya mencionada Rubens y las artes del libro y Rubens, Van Dyck y el grabado europeo de su época.
En la página web de la BNE se puede consultar una selección de diez obras destacadas de la exposición, a cargo de la comisaria, con información técnica e imagen digitalizada interactiva de las piezas. Entre otros magníficos grabados propuestos, destaca sin duda el Retrato de Rubens, grabado por Pontius según dibujo de Van Dyck. Realizada entre 1632 y 1634, esta obra pertenece a la célebre lconographie de Van Dyck y encabeza los retratos de artistas que realizó Van Dyck para esta gran obra. También son de fundamental interés dos piezas como Santa Catalina, única estampa firmada por Rubens con “fecit” de grabador, y Retrato de Antoon van Dyck, grabado por Lucas Vorsterman, según la grisalla del mismo Van Dyck que se conserva en la Colección del Duque de Buccleuch, en la Boughton House de Kettering (Inglaterra).
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