Reseña de la exposición METAPINTURA. UN VIAJE A LA IDEA DEL ARTE. Museo Nacional del Prado. Salas A y B. Edificio Jerónimos. Madrid. Hasta el 19 de febrero de 2017. Comisario: Javier Portús.
La exposición que te recomendamos esta semana es una ocasión muy especial para ver una selección de obras maestras, pertenecientes a la colección del Museo Nacional del Prado, presentadas bajo una perspectiva nueva y reunidas dentro de un marco discursivo inédito. Muchas de ellas no se encuentran habitualmente expuestas en las salas, ya que se suelen conservar en depósitos o en los almacenes del museo. Estamos hablando de Metapintura. Un viaje a la idea del arte, que podrás ver, en Madrid, hasta el 19 de febrero de 2017.
El Prado reflexiona sobre sí mismo y sobre las leyes de la creación artística
Al igual que otras muestras temporales, realizadas en el pasado, Metapintura forma parte de un programa expositivo a través del cual El Prado mira a sí mismo y a sus colecciones, analizando, de manera auto-reflexiva, su propia historia y el inestimable patrimonio artístico que atesora dentro de sí desde 1819, año de su creación. En esta ocasión pretende investigar el propio arte de la pintura y las leyes que rigen la creación artística, a través de un conjunto de obras fechadas entre principios del siglo XVI y finales del siglo XIX, esto es, desde la Edad Moderna hasta los albores de la Época Contemporánea.
En palabras del comisario de la exposición, Javier Portús, Jefe de Conservación de Pintura Española (hasta 1700) del Prado, Metapintura «gira en torno a dos pivotes diferentes, pero complementarios. Por un lado las Colecciones Reales y por otro lado la pintura española, que constituyen la columna vertebral del Museo». En este vídeo puedes ver algunas imágenes de la exposición, acompañadas por una detallada introducción del comisario:
Un viaje a través de obras de Tiziano, El Greco, Rubens, Velázquez, Zurbarán, Murillo, Goya y otros muchos
Visible en las salas A y B del edificio Jerónimos, Metapintura. Un viaje a la idea del arte está compuesta por 137 obras, entre pinturas, dibujos, estampas, libros, esculturas, medallas y piezas de artes decorativas. La mayoría de ellas pertenecen a los fondos del Prado. Sin embargo, 22 piezas proceden de 18 museos y coleccionistas diferentes, como la Fundación Casa de Alba, la National Gallery de Londres, el Museo de Bellas Artes de Sevilla, el Banco de España o el Museo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando entre otros.
Las obras, realizadas por artistas como Francisco de Zurbarán, Tiziano, José García Hidalgo, El Greco, Giorgio Vasari, Pedro Berruguete, Pedro Pablo Rubens, Alonso Cano, Bartolomé Esteban Murillo, Diego Velázquez o Francisco de Goya entre otros, hacen alusión al arte y a la creación de imágenes, de diferentes maneras. En ocasiones representan los orígenes de la idea de arte o retratan a artistas, mecenas y coleccionistas; a veces incluyen en el cuadro otras pinturas, esculturas o autorretratos de los artistas; en otros casos hacen referencia a la relación dialéctica entre realidad y ficción, a través del tema del cuadro dentro del cuadro, o a temáticas más contemporáneas, como el intento de romper el espacio pictórico y prolongar la simulación artística hacia el espacio del espectador etc. Entre las obras que se pueden admirar, cabe destacar piezas como Cristo crucificado contemplado por un pintor (h. 1650) de Francisco de Zurbarán; La Santa Faz (1586-95) de El Greco o Las hilanderas o La fábula de Aracne (h. 1655-60) de Diego Velázquez.
El recorrido expositivo se articula en forma de viaje, dividido en quince etapas, que abordan, desde puntos de vistas diferentes, la relación entre el arte, el artista y la sociedad; repasando el origen del concepto moderno de historia del arte y la irrupción de la subjetividad del artista en el horizonte de la representación pictórica. Una etapa destacada de este viaje, visual y metarreflexivo, que atraviesa varios siglos de historia de la pintura, es la titulada El Quijote y las Meninas, en la que el Museo del Prado rinde un homenaje especial a Miguel de Cervantes, en el IV centenario de su fallecimiento. Celebrando El Quijote, como un hito universal de la literatura “autorreferencial”, el libro pone en relación esta obra fundante de la literatura española con el papel que tiene en la pintura Las meninas (1656) de Velázquez: su homólogo en las artes plásticas y máxima expresión de la pintura sobre la pintura.
Si quieres profundizar sobre esta interesante exposición, en este vídeo puedes ver la grabación de la conferencia “La exposición Metapintura. Un viaje a la idea del arte”, impartida por Javier Portús, el 16 de noviembre de 2016, dentro del programa de actividades paralelas:
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